9. Llamó entonces Abimelec a Abrahán y le dijo: «¡En qué lío nos metiste! ¿En qué te he ofendido, para que traigas sobre mí y mi país un pecado tan grande? Te has portado como no debe hacerse.»





“Pode-se manter a paz de espírito mesmo no meio das tempestades da vida”. São Padre Pio de Pietrelcina