Talált 143 Eredmények: escucha

  • Balaam volvió entonces donde aquél, que seguía de pie al lado de su holocausto con los jefes de Moab. Balac le preguntó a Balaam: "¿Qué dijo Yavé?" Y Balaam proclamó su poema: "¡Levántate Balac, escucha! ¡Pon atención, hijo de Sipor! (Números 23, 17)

  • oráculo del que escucha las palabras de Dios, que ve lo que el Dios de la Estepa le da a ver, que se postra, y Dios le abre los ojos. (Números 24, 4)

  • oráculo del que escucha las palabras de Dios y que posee la ciencia del Altísimo, que ve lo que el Dios de la Estepa le deja ver, que se postra, y Dios le abre los ojos. (Números 24, 16)

  • Y ahora, Israel, escucha las normas y los mandamientos que yo te enseño, para que los pongas en práctica. Así vivirás, y entrarás al país que te da Yavé, Dios de tus padres, y tomarás posesión de él. (Deuteronomio 4, 1)

  • Moisés convocó a todo Israel y le dijo: «Escucha, Israel, las normas y los mandamientos que te enseño en este día; ustedes los aprenderán y cuidarán de ponerlos en práctica. (Deuteronomio 5, 1)

  • Escucha, pues, Israel, y cuida de poner en práctica lo que ha de traerte felicidad y prosperidad en esta tierra que mana leche y miel, como lo prometió Yavé, Dios de tus padres. (Deuteronomio 6, 3)

  • Escucha, Israel: Yavé, nuestro Dios, es Yavé-único. (Deuteronomio 6, 4)

  • Escucha, Israel: Hoy vas a pasar el Jordán para desalojar naciones más grandes y más fuertes que tú, con ciudades grandes cuyas murallas llegan hasta el cielo. (Deuteronomio 9, 1)

  • Escucha y observa todas las cosas que te mando, y siempre te irá bien a ti y a tus hijos después de ti, por hacer lo que es bueno y correcto a los ojos de Yavé. (Deuteronomio 12, 28)

  • Si alguno no escucha mis palabras, cuando habla el profeta de parte mía, yo mismo le pediré cuentas. (Deuteronomio 18, 19)

  • «Escucha, Israel, estás para enfrentar a tus enemigos; que no desmaye tu corazón, no tengas miedo ni te turbes, ni tiembles delante de ellos, (Deuteronomio 20, 3)

  • Si un hombre tiene un hijo rebelde y desvergonzado, que no atiende lo que mandan su padre o su madre, ni los escucha cuando lo corrigen, (Deuteronomio 21, 18)


“Amemos ao próximo. Custa tão pouco querer bem ao outro.” São Padre Pio de Pietrelcina