Talált 12 Eredmények: magistrados

  • Establecerás jueces y magistrados para tus tribus en cada una de las ciudades que Yavé te dé, para que juzguen al pueblo según la justicia. (Deuteronomio 16, 18)

  • Y tú, Esdras, según la sabiduría que de Dios tienes, nombra jueces y magistrados que administren justicia a todo el pueblo del otro lado del río, a todos los que conocen la Ley de tu Dios; y enséñasela a los que no la conocen. (Esdras 7, 25)

  • Pues tomaron de entre ellos mujeres para sí y para sus hijos y mezclaron su raza santa con la de los habitantes de esta tierra. Incluso los jefes y magistrados fueron los primeros en cometer este pecado.» (Esdras 9, 2)

  • A los magistrados del rey de Judá le dirás: Servidores de la dinastía de David, oigan lo que les dice Yavé; (Jeremías 21, 11)

  • El rey Joaquim, con todos sus oficiales y magistrados, al oír sus palabras, trató de darle muerte. Al tener noticia de eso, Urías, aterrorizado, huyó a Egipto. (Jeremías 26, 21)

  • Y los presentaron a los magistrados diciendo: «Estos hombres son judíos y están alborotando nuestra ciudad; (Hecho de los Apóstoles 16, 20)

  • Por la mañana los magistrados enviaron a unos oficiales con esta orden: «Deja en libertad a esos hombres.» (Hecho de los Apóstoles 16, 35)

  • El carcelero se lo comunicó a Pablo y Silas, diciendo: «Los magistrados han dado orden de dejarlos en libertad. salgan, pues, y marchen en paz.» (Hecho de los Apóstoles 16, 36)

  • Los oficiales transmitieron esto a los magistrados, que se llenaron de miedo al escuchar que eran ciudadanos romanos. (Hecho de los Apóstoles 16, 38)

  • Pero al no encontrarlos allí, arrastraron a Jasón y a otros creyentes ante los magistrados de la ciudad, gritando: «Esos hombres que han revolucionado todo el mundo han llegado también hasta aquí (Hecho de los Apóstoles 17, 6)

  • Lograron impresionar al pueblo y a los magistrados que los oían, (Hecho de los Apóstoles 17, 8)

  • Si Demetrio y sus artífices tienen cargos contra alguno, para eso están las audiencias y los magistrados: que presenten allí sus acusaciones. (Hecho de los Apóstoles 19, 38)


O sábio elogia a mulher forte dizendo: os seu dedos manejaram o fuso. A roca é o alvo dos seus desejos. Fie, portanto, cada dia um pouco. Puxe fio a fio até a execução e, infalivelmente, você chegará ao fim. Mas não tenha pressa, pois senão você poderá misturar o fio com os nós e embaraçar tudo.” São Padre Pio de Pietrelcina