Talált 23 Eredmények: Corriendo

  • Después fue corriendo hasta el corral, eligió un ternero tierno y bien cebado, y lo entregó a su sirviente, que de inmediato se puso a prepararlo. (Génesis 18, 7)

  • En seguida vació su cántaro en el bebedero, y fue corriendo de nuevo a la fuente, hasta que sacó agua para todos los camellos. (Génesis 24, 20)

  • Entonces le contó que él era pariente de Labán -por ser hijo de Rebeca- y ella fue corriendo a comunicar la noticia a su padre. (Génesis 29, 12)

  • Un muchacho vino corriendo y comunicó la noticia a Moisés, con estas palabras: "Eldad y Medad están profetizando en el campamento". (Números 11, 27)

  • Aarón tomó el incensario, como se lo había mandado Moisés, y fue corriendo a ponerse en medio de la asamblea, donde ya había comenzado la plaga. Puso el incienso y practicó el rito de expiación en favor del pueblo. (Números 17, 12)

  • Josué envío a dos emisarios, que fueron corriendo a la carpa, y encontraron el manto que estaba escondido en ella, y la plata debajo de él. (Josué 7, 22)

  • Samuel fue corriendo adonde estaba Elí y le dijo: "Aquí estoy, porque me has llamado". Pero Elí le dijo: "Yo no te llamé; vuelve a acostarte". Y él se fue a acostar. (I Samuel 3, 5)

  • Fueron corriendo a sacarlo de allí; y cuando se presentó en medio del pueblo, sobresalía por encima de todos, de los hombros para arriba. (I Samuel 10, 23)

  • David fue corriendo y se paró junto al filisteo; le agarró la espada, se la sacó de la vaina y lo mató, cortándole la cabeza. Al ver que su héroe estaba muerto, los filisteos huyeron. (I Samuel 17, 51)

  • y dijo a su servidor: "Corre a buscar las flechas que voy a tirar". El servidor fue corriendo, y Jonatán lanzó la flecha más allá de él. (I Samuel 20, 36)

  • Ajimáas, hijo de Sadoc, dijo: "¡Iré corriendo a llevar al rey la buena noticia de que el Señor le ha hecho justicia, librándolo de sus enemigos!". (II Samuel 18, 19)

  • Luego Joab dijo a un cusita: "Ve a informar al rey de lo que has visto". El cusita se postró delante de Joab y salió corriendo. (II Samuel 18, 21)


“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina