Talált 29 Eredmények: Observar

  • José se acordó de los sueños que había tenido acerca de ellos. Entonces les dijo: "Ustedes son espías, y han venido a observar las zonas desguarnecidas del país". (Génesis 42, 9)

  • Pero él insistió: "No, ustedes han venido a observar las zonas desguarnecidas del país". (Génesis 42, 12)

  • Moisés pensó: "Voy a observar este grandioso espectáculo. ¿Por qué será que la zarza no se consume?". (Exodo 3, 3)

  • El Señor dijo a Moisés: "¿Hasta cuando se resistirán a observar mis mandamientos y mis leyes? (Exodo 16, 28)

  • Habla a los israelitas en los siguientes términos: No dejen nunca de observar mis sábados, porque el sábado es un signo puesto entre yo y ustedes, a través de las generaciones, para que ustedes sepan que yo, el Señor, soy el que los santifico. (Exodo 31, 13)

  • Y esta será nuestra justicia: observar y poner en práctica todos estos mandamientos delante del Señor, nuestro Dios, como él nos lo ordenó". (Deuteronomio 6, 25)

  • Pero ten cuidado: no olvides al Señor, tu Dios, ni dejes de observar sus mandamientos, sus leyes y sus preceptos, que yo te prescribo hoy. (Deuteronomio 8, 11)

  • Estos son los preceptos y las leyes que ustedes deberán observar y poner en práctica, mientras vivan en la tierra que el Señor, el Dios de tus padres, te da en posesión. (Deuteronomio 12, 1)

  • Josué, hijo de Nun, envió clandestinamente desde Sitím a dos espías, con la siguiente consigna: "Vayan a observar el terreno". Ellos partieron y, al llegar a Jericó, entraron en casa de una prostituta llamada Rajab, donde se alojaron. (Josué 2, 1)

  • Cuando se notificó al rey de Jericó que unos hombres israelitas habían llegado durante la noche para observar el terreno, (Josué 2, 2)

  • mandó decir a Rajab: "Saca afuera a esos hombres que vinieron a verte, los que entraron en tu casa, porque han venido únicamente para observar todo el país". (Josué 2, 3)

  • Pero pongan mucho cuidado en practicar los mandamientos y la Ley que les prescribió Moisés, el servidor del Señor, a saber: amar al Señor, su Dios, y seguir todos sus caminos; observar sus mandamientos, mantenerse fieles a él, y servirlo con todo el corazón y con toda el alma". (Josué 22, 5)


“Aquele que procura a vaidade das roupas não conseguirá jamais se revestir com a vida de Jesus Cristo.” São Padre Pio de Pietrelcina