Talált 57 Eredmények: fieras

  • Dios dijo: "Hagamos al hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza; y que le estén sometidos los peces del mar y las aves del cielo, el ganado, las fieras de la tierra, y todos los animales que se arrastran por el suelo". (Génesis 1, 26)

  • Y a todas la fieras de la tierra, a todos los pájaros del cielo y a todos los vivientes que se arrastran por el suelo, les doy como alimento el pasto verde". Y así sucedió. (Génesis 1, 30)

  • y junto con ellos, los animales de todas las especies: las fieras, el ganado, los reptiles, los pájaros y todos los demás animales con alas. (Génesis 7, 14)

  • Entonces perecieron todos los seres que se movían sobre la tierra: los pájaros, el ganado, las fieras, todos los animales que se arrastran por el suelo, y también los hombres. (Génesis 7, 21)

  • y con todos los seres vivientes que están con ustedes: con los pájaros, el ganado y las fieras salvajes; con todos los animales que salieron del arca, en una palabra, con todos los seres vivientes que hay en la tierra. (Génesis 9, 10)

  • Nunca te llevé un animal despedazado por las fieras: yo mismo debía reparar la pérdida, porque tú me reclamabas lo que había sido robado tanto de día como de noche. (Génesis 31, 39)

  • Este, al reconocerla, exclamó: "¡Es la túnica de mi hijo! Un animal salvaje lo ha devorado. ¡José ha sido presa de las fieras!". (Génesis 37, 33)

  • Uno se fue de mi lado; yo tuve que reconocer que las fieras lo habían despedazado, y no volví a verlo más. (Génesis 44, 28)

  • La grasa de un animal muerto o despedazado por las fieras podrá servir para cualquier uso, pero no deberán comerla. (Levítico 7, 24)

  • Cualquiera, sea nativo o extranjero, que coma un animal muerto o despedazado por las fieras, deberá lavar su ropa y bañarse con agua, y será impuro hasta la tarde. Después será puro. (Levítico 17, 15)

  • No comerá ningún animal muerto o despedazado por las fieras, porque de lo contrario incurriría en impureza. Yo soy el Señor. (Levítico 22, 8)

  • Enviaré contra ustedes las fieras del campo, para que les arrebaten a sus hijos y exterminen su ganado. Ellas los diezmarán, y los caminos de ustedes quedarán desiertos. (Levítico 26, 22)


“Se quisermos colher é necessário não só semear, mas espalhar as sementes num bom campo. Quando as sementes se tornarem plantas, devemos cuidá-las para que as novas plantas não sejam sufocadas pelas ervas daninhas.” São Padre Pio de Pietrelcina