Talált 326 Eredmények: pueblos

  • Asdod, con los pueblos y aldeas anejas; Gaza, con los pueblos y aldeas anejas, hasta el río de Egipto; el mar Mediterráneo era el límite. (Josué 15, 47)

  • El Señor les dio paz con todos los pueblos vecinos, como había jurado a sus padres; ninguno de sus enemigos pudo resistirlos; a todos los entregó el Señor en sus manos. (Josué 21, 44)

  • Vosotros habéis visto todo lo que hizo el Señor, Dios vuestro, a todos estos pueblos ante vosotros; es el Señor, vuestro Dios, el que ha combatido por vosotros. (Josué 23, 3)

  • Mirad, yo he repartido entre vosotros por suerte, como heredad para vuestras tribus, estos pueblos que han quedado, lo mismo que aquellos que yo he exterminado desde el Jordán hasta el mar Mediterráneo, a occidente. (Josué 23, 4)

  • no os mezcléis con estos pueblos que quedan en medio de vosotros, no os acordéis del nombre de sus dioses, no los invoquéis en vuestros juramentos, no les sirváis ni os prosternéis ante ellos. (Josué 23, 7)

  • El Señor ha echado de vuestra presencia pueblos numerosos y fuertes; ninguno pudo resistir ante vosotros hasta el día de hoy. (Josué 23, 9)

  • Pero si os apartáis del Señor y os unís a estos pueblos que quedan entre vosotros, emparentándoos con ellos en matrimonios mixtos, (Josué 23, 12)

  • estad seguros de que el Señor, vuestro Dios, no echará de vuestra presencia a estos pueblos y serán para vosotros una red, un lazo, un látigo en vuestros costados y espinas en vuestros ojos, hasta que desaparezcáis de esta buena tierra que el Señor, vuestro Dios, os ha dado. (Josué 23, 13)

  • porque el Señor es nuestro Dios; él nos sacó a nosotros y a nuestros padres de Egipto, de la casa de la esclavitud; ha realizado ante nuestros ojos estos grandes prodigios y nos ha protegido durante todo el camino que hemos recorrido y en todos los pueblos por los que hemos pasado. (Josué 24, 17)

  • El Señor ha echado delante de nosotros a todos los pueblos y a los amorreos que vivían en el país. También nosotros serviremos al Señor, porque él es nuestro Dios". (Josué 24, 18)

  • Por eso os digo: No echaré a estos pueblos delante de vosotros. Serán vuestros enemigos, y sus dioses serán una tentación para vosotros". (Jueces 2, 3)

  • Abandonaron al Señor, Dios de sus padres, que los había sacado de Egipto, y se fueron tras otros dioses de los pueblos vecinos; los adoraron, provocando por ello la ira del Señor. (Jueces 2, 12)


“Deus quer que as suas misérias sejam o trono da Sua misericórdia.” São Padre Pio de Pietrelcina