Romanos, 1
12. o más bien, para sentir entre vosotros el mutuo consuelo de la común fe: la vuestra y la mía.
12. o más bien, para sentir entre vosotros el mutuo consuelo de la común fe: la vuestra y la mía.
“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina