6. de lo contrario, el vengador del homicida lo perseguirá y, si el camino fuese largo, lo alcanzaría y le daría muerte. Y, sin embargo, ese hombre no merecía la muerte, pues nunca había odiado a su víctima.





“O amor tudo esquece, tudo perdoa, sem reservas.” São Padre Pio de Pietrelcina