Ezequiel, 38
20. Temblarán ante mí los peces del mar, los pájaros del cielo, los animales del campo, todos los reptiles que serpean sobre el suelo y todos los hombres de la superficie de la tierra.
20. Temblarán ante mí los peces del mar, los pájaros del cielo, los animales del campo, todos los reptiles que serpean sobre el suelo y todos los hombres de la superficie de la tierra.
“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina