33. Pero aquel hombre, señor del país, nos respondió: De este modo sabré si sois sinceros: dejad conmigo aquí uno de vuestros hermanos, tomad lo necesario para vuestras familias hambrientas y partid.





Uma filha espiritual perguntou a Padre Pio: “O Senhor cura tantas pessoas, por que não cura esta sua filha espiritual?” Padre Pio respondeu-lhe em voz baixa: “E não nos oferecemos a Deus?” São Padre Pio de Pietrelcina