Fondare 907 Risultati per: Jerusalén

  • Y aquellas dieciocho personas que quedaron aplastadas cuando la torre de Siloé se derrumbó, ¿creen ustedes que eran más culpables que los demás habitantes de Jerusalén? (Evangelio según San Lucas 13, 4)

  • Jesús iba enseñando por ciudades y pueblos mientras se dirigía a Jerusalén. (Evangelio según San Lucas 13, 22)

  • Pero tengo que seguir mi camino hoy, mañana y un poco más, porque no es correcto que un profeta sea asesinado fuera de Jerusalén. (Evangelio según San Lucas 13, 33)

  • ¡Jerusalén, Jerusalén! ¡Qué bien matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces he querido reunir a tus hijos como la gallina reúne a sus polluelos debajo de sus alas, y tú no has querido! (Evangelio según San Lucas 13, 34)

  • De camino a Jerusalén, Jesús pasaba por los confines entre Samaría y Galilea, (Evangelio según San Lucas 17, 11)

  • Jesús tomó aparte a los Doce y les dijo: «Estamos subiendo a Jerusalén y allí se va a cumplir todo lo que escribieron los profetas sobre el Hijo del Hombre: (Evangelio según San Lucas 18, 31)

  • Cuando Jesús estaba ya cerca de Jerusalén, dijo esta parábola, pues los que lo escuchaban creían que el Reino de Dios se iba a manifestar de un momento a otro. (Evangelio según San Lucas 19, 11)

  • Dicho esto, Jesús pasó adelante y emprendió la subida hacia Jerusalén. (Evangelio según San Lucas 19, 28)

  • Cuando vean a Jerusalén rodeada por ejércitos, sepan que muy pronto será devastada. (Evangelio según San Lucas 21, 20)

  • Morirán al filo de la espada, serán llevados prisioneros a todas las naciones, y Jerusalén será pisoteada por las naciones hasta que se cumplan los tiempos de las naciones. (Evangelio según San Lucas 21, 24)

  • Cuando supo que Jesús pertenecía a la jurisdicción de Herodes, se lo envió, pues Herodes se hallaba también en Jerusalén por aquellos días. (Evangelio según San Lucas 23, 7)

  • Jesús, volviéndose hacia ellas, les dijo: «Hijas de Jerusalén, no lloren por mí. Lloren más bien por ustedes mismas y por sus hijos. (Evangelio según San Lucas 23, 28)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina