Fondare 262 Risultati per: Carpa

  • Entonces, el Creador de todas las cosas me dio una orden, el que me creó me hizo instalar mi carpa, él me dijo: ‘Levanta tu carpa en Jacob y fija tu herencia en Israel’. (Eclesiástico 24, 8)

  • Quedará despoblada para siempre, no la habitarán a lo largo de las generaciones; allí el árabe no plantará su carpa ni los pastores apacentarán sus rebaños. (Isaías 13, 20)

  • el trono será afianzado en la fidelidad y sobre él se sentará con lealtad, en la carpa de David, un juez celoso del derecho y dispuesto a hacer justicia. (Isaías 16, 5)

  • Mira a Sión, la ciudad de nuestras fiestas, que tus ojos vean a Jerusalén, morada tranquila, carpa que no será desplazada, cuyas estacas no serán arrancadas y cuyas cuerdas no se romperán. (Isaías 33, 20)

  • Arrancan mi morada y me la arrebatan, como una carpa de pastores. Como un tejedor, yo enrollaba mi vida, pero él me corta de la trama: ¡de la mañana a la noche terminas conmigo! (Isaías 38, 12)

  • Él está sentado sobre la cúpula de la tierra, donde los habitantes son como langostas. Él extiende los cielos como un tul, los despliega como una carpa para habitar en ellos. (Isaías 40, 22)

  • ¡Ensancha el espacio de tu carpa, despliega tus lonas sin mezquinar, alarga tus cuerdas, afirma tus estacas! (Isaías 54, 2)

  • Mi carpa ha sido devastada y se han roto todas mis cuerdas. Mis hijos me dejaron, ya no están más, no hay nadie que despliegue mi carpa y levante mis toldos. (Jeremías 10, 20)

  • Aun cuando derrotaran a todo el ejército de los caldeos que combaten contra ustedes, y no les quedaran más que algunos heridos, estos se levantarían cada uno en su carpa y prenderían fuego a esta ciudad. (Jeremías 37, 10)

  • Por el contrario, llevaron consigo la carpa de Moloc y la estrella del Dios Refán, esos ídolos que ustedes fabricaron para adorarlos. Por eso yo los deportaré más alláde Babilonia. (Hechos 7, 43)


“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina