Fondare 15 Risultati per: primeras
Y las siete vacas macilentas y malas se comieron a las siete vacas primeras, las lustrosas. (Génesis 41, 20)
Dijo Yahveh a Moisés. «Labra dos tablas de piedra como las primeras, sube donde mí, al monte y yo escribiré en las tablas las palabras que había en las primeras tablas que rompiste. (Exodo 34, 1)
Labró Moisés dos tablas de piedra como las primeras y, levantándose de mañana, subió al monte Sinaí como le había mandado Yahveh, llevando en su mano las dos tablas de piedra. (Exodo 34, 4)
Luego tomarán otras piedras y las pondrán en lugar de las primeras; y también argamasa nueva para revocar la casa. (Levítico 14, 42)
y cómo es la tierra, fértil o pobre, si tiene árboles o no. Tened valor y traed algunos productos del país.» Era el tiempo de las primeras uvas. (Números 13, 20)
Yahveh me dijo entonces: «Labra dos tablas de piedra como las primeras y sube donde mí a la montaña; hazte también un arca de madera. (Deuteronomio 10, 1)
Yo escribiré en las tablas las palabras que había en las primeras que rompiste, y tú las depositarás en el arca.» (Deuteronomio 10, 2)
Hice un arca de madera de acacia, labré dos tablas de piedra como las primeras y subí a la montaña con las dos tablas en la mano. (Deuteronomio 10, 3)
También éstos entraron en suerte de la misma manera que sus hermanos, los hijos de Aarón, en presencia del rey David, Sadoq, Ajimélek y los cabezas de familias sacerdotales y los levitas, siendo tradatas las primeras familias igual que las últimas. (I Crónicas 24, 31)
El resto de sus hechos y todas sus obras, las primeras y las postreras, está escrito en el libro de los reyes de Judá e Israel. (II Crónicas 28, 26)
y sus obras primeras y postreras, están escritas en el libro de los reyes de Israel y de Judá. (II Crónicas 35, 27)
Muchas veces era yo el único que iba a Jerusalén, con ocasión de las fiestas, tal como está prescrito para todo Israel por decreto perpetuo; en cobrando las primicias y las crías primeras y diezmos de mis bienes y el primer esquileo de mis ovejas, acudía presuroso a Jerusalén (Tobías 1, 6)