8. Si te encuentras en tu ciudad con una causa difícil, de homicidio, peleas, lesiones u otro litigio cualquiera, irás al lugar elegido por el Señor, tu Dios,





“O meu passado, Senhor, à Tua misericórdia. O meu Presente, ao Teu amor. O meu futuro, à Tua Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina