Exodo, 9
12. Pero el Señor endureció el corazón del Faraón, que no dejó salir al pueblo, como había dicho el Señor.
12. Pero el Señor endureció el corazón del Faraón, que no dejó salir al pueblo, como había dicho el Señor.
“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina