1. Bel vacila, Nebo se desploma; sus ídolos son carga de animales y bestias, llevados como fardos sobre bestias extenuadas.

2. Han vacilado, se han desplomado a una, no pueden liberar a los que los llevan, pues ellos mismos van al cautiverio.

3. Escuchadme, casa de Jacob, y todo el resto de la casa de Israel, que habéis sido llevados por mí desde el vientre, sostenidos desde el seno materno.

4. Hasta vuestra ancianidad yo seré el mismo, os sostendré hasta vuestra vejez. Lo he hecho hasta aquí, os he llevado, y os sostendré, os salvaré.

5. ¿A quién me vais a asemejar y comparar, dónde me encontraréis igual o parecido?

6. Sopesan ellos el oro de su bolsa, y la plata en la balanza; pagan a un orfebre para que les haga un dios, al cual, postrados, adoran.

7. Lo cargan a hombros, lo llevan, lo ponen en su sitio, y allí se está quieto. No se mueve de su sitio. A gritos le invocan y no responde, a nadie salva de la angustia.

8. Recordad esto y entendedlo bien; entrad en razón, pecadores.

9. Acordaos de lo pasado desde antiguo, que yo soy Dios y no existe ningún otro dios y nadie igual a mí.

10. Desde el principio anuncio yo el fin, y de antemano lo que aún no ha sucedido; yo digo: Mi decisión se cumple, y todo lo que me place lo ejecuto.

11. Del oriente llamo al águila; de un lejano país, al hombre que he designado. Como lo digo lo hago, como lo planeo lo ejecuto.

12. Escuchadme los de corazón indómito, los que estáis lejos de la justicia.

13. Próxima está mi justicia, no está lejos, mi salvación no tardará. Daré mi salvación a Sión y mi gloria a Israel.





“Padre Pio disse a um filho espiritual: Trabalhe! Ele perguntou: No que devo trabalhar, Padre? Ele respondeu: Em amar sempre mais a Jesus!” São Padre Pio de Pietrelcina