4. Pero el Rey de reyes excitó la cólera de Antíoco contra aquel malvado; Lisias demostró al rey que aquel hombre era el causante de todos los males, y Antíoco ordenó conducirle a Berea y darle allí muerte, según las costumbres del lugar.





“Esforce-se, mesmo se for um pouco, mas sempre…” São Padre Pio de Pietrelcina