Isaías, 17
2. Abandonadas sus ciudades para siempre, serán para los ganados; se acostarán allí y no habrá quien los espante.
2. Abandonadas sus ciudades para siempre, serán para los ganados; se acostarán allí y no habrá quien los espante.
“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina