Salmos, 108
12. ¿No eres tú, oh Dios, que nos has rechazado y ya no sales, oh Dios, con nuestras tropas?
12. ¿No eres tú, oh Dios, que nos has rechazado y ya no sales, oh Dios, con nuestras tropas?
“Combata vigorosamente, se está interessado em obter o prêmio destinado às almas fortes.” São Padre Pio de Pietrelcina