Ezequiel, 34
24. Yo, el Señor, seré su Dios, y mi siervo David será príncipe en medio de ellos: Yo, el Señor, he hablado.
24. Yo, el Señor, seré su Dios, y mi siervo David será príncipe en medio de ellos: Yo, el Señor, he hablado.
“Há alegrias tão sublimes e dores tão profundas que não se consegue exprimir com palavras. O silêncio é o último recurso da alma, quando ela está inefavelmente feliz ou extremamente oprimida!” São Padre Pio de Pietrelcina