2. El príncipe entrará desde fuera por el vestíbulo de la puerta y se quedará junto a las jambas de la puerta, mientras los sacerdotes ofrecerán su holocausto y sus sacrificios de reconciliación. Se prosternará sobre el umbral de la puerta, luego saldrá y la puerta no se cerrará hasta la tarde.





“Nossa Senhora está sempre pronta a nos socorrer, mas por acaso o mundo a escuta e se emenda?” São Padre Pio de Pietrelcina