9. Y Efraím dice: «Sí, me he enriquecido, me ha fraguado una fortuna.» ¡Ninguna de sus ganancias se hallará, por el pecado de que se ha hecho culpable!





“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina