6. Entonces Moisés dispuso que se corriera esta orden por el campamento: "Nadie traiga más ofrendas para el santuario". Así se impidió al pueblo hacer nuevas aportaciones,





“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina