20. Cuando Dalila le gritó: «¡Sansón, los filisteos!», él despertó y pensó que se salvaría, como en las otras ocasiones. Pero no sabía que Yavé no estaba con él.





“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina