Encontrados 51 resultados para: Abner

  • Aquel día hubo una batalla muy dura, donde Abner y los hombres de Israel fueron derrotados por los partidarios de David. (2 Samuel 2, 17)

  • Se puso a perseguir a Abner sin desviarse a ningún lado. (2 Samuel 2, 19)

  • Abner se volvió y le preguntó: «¿Eres tú Asael?» Respondió: «Yo soy». (2 Samuel 2, 20)

  • Y entonces Abner le dijo: «Apártate a la derecha o a la izquierda, toma a uno de los jóvenes y apodérate de sus despojos.» (2 Samuel 2, 21)

  • Pero Asael no quiso apartarse. Abner repitió a Asael: «Apártate de mí para que no te mate. Pues, ¿cómo podría después reconciliarme con tu hermano Joab?» (2 Samuel 2, 22)

  • Pero Asael no quiso apartarse, y Abner le atravesó el vientre con la lanza, que salió por la espalda. Allí mismo cayó y murió. Todos los que pasaban se detenían en el lugar donde Asael había caído muerto. (2 Samuel 2, 23)

  • Joab y Abisaí continuaron la persecución de Abner; al atardecer, llegaron a Ammá, que está al oriente de Guiaj, sobre el camino del desierto de Gabaón. (2 Samuel 2, 24)

  • Los hijos de Benjamín, formando un apretado grupo, hicieron filas detrás de Abner y se parapetaron en lo alto de la colina de Ammá. (2 Samuel 2, 25)

  • Abner llamó a Joab y le dijo: «¿Hasta cuándo va a seguir matando la espada? ¿No sabes que esto terminará en una desgracia? ¿Qué esperas para decir al pueblo que deje de perseguir a sus hermanos?» (2 Samuel 2, 26)

  • Abner y sus hombres marcharon toda la noche por la Arabá, pasaron el Jordán y después de atravesar el Bitrón llegaron a Majanayim. (2 Samuel 2, 29)

  • Joab volvió de la persecución de Abner y reunió a toda su tropa. De entre los servidores de David, además de Asael faltaban diecinueve hombres. (2 Samuel 2, 30)

  • Los servidores de David, por su parte, habían dado muerte a trescientos sesenta hombres de la tribu de Benjamín y de los de Abner. (2 Samuel 2, 31)


“Há duas razões principais para se orar com muita satisfação: primeiro para render a Deus a honra e a glória que Lhe são devidas. Segundo, para falar com São Padre Pio de Pietrelcina