Encontrados 63 resultados para: Arco

  • Como un enemigo, ha preparado su arco, ha afirmado su derecha, como un adversario ha matado todo lo que encanta los ojos; en la casa de la Hija de Sión ha vertido su furor como fuego. (Lamentaciones 2, 4)

  • Preparó su arco, y me puso como blanco de sus flechas. (Lamentaciones 3, 12)

  • Romperé en tu mano izquierda tu arco y haré que caigan las flechas de tu mano derecha. (Ezequiel 39, 3)

  • Entonces los habitantes de las ciudades de Israel saldrán, encenderán dos fogatas y quemarán las armas, los escudos grandes y chicos, el arco y las flechas, el dardo y la lanza, los quemarán por siete años. (Ezequiel 39, 9)

  • Pero tendré compasión de la casa de Judá y los salvaré por Yavé su Dios; los salvaré sin usar el arco ni la espada, ni la guerra ni los carros ni los caballos.) (Oseas 1, 7)

  • Ese día haré un pacto con las fieras salvajes, con las aves de rapiña y las serpientes de la tierra, para que no le hagan daño. Romperé el arco y la espada, alejaré de su tierra la guerra, y haré que la gente duerma segura ahí. (Oseas 2, 20)

  • Prefieren lo que es malo y son como un arco que no apunta. Sus jefes morirán acuchillados por haber proferido tantas injurias, y en Egipto se reirán de ellos. (Oseas 7, 16)

  • El que dispara el arco no lo podrá estirar, el rápido corredor no logrará huir, el caballero no saldrá con vida, (Amós 2, 15)

  • Preparas tu arco para disparar y sacas tus flechas de la aljaba, se abre la tierra y saltan torrentes; (Habacuc 3, 9)

  • Destruirá los carros de Efraím y los caballos de Jerusalén. Entonces se podrá romper el arco con flechas, pues él dictará la paz a las naciones. Extenderá su dominio de un mar al otro mar, y desde el Eufrates hasta el fin del mundo. (Zacarías 9, 10)

  • Yo estiraré a Judá como un arco y le pondré como flecha a Efraím; lanzaré tus hijos, oh Sión, contra los griegos, y tú serás como la espada de un héroe. (Zacarías 9, 13)

  • él es el que dará el ejército, la lanza y el arco de guerra; el es el que dará todos los jefes. (Zacarías 10, 4)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina