Encontrados 39 resultados para: Escapar

  • El comportamiento del hombre está siempre ante sus ojos, no pueden escapar a su mirada. (Sirácides (Eclesiástico) 17, 15)

  • Por eso, así habla Yavé: Les voy a mandar una catástrofe de la cual nadie podrá escapar. Y aunque me pidan auxilio, no los ayudaré. (Jeremías 11, 11)

  • Y tú no creas que te vas a escapar de él, sino que caerás prisionero y serás entregado en sus manos. Verás al rey de Babilonia cara a cara y le hablarás frente a frente. Luego partirás a Babilonia. (Jeremías 34, 3)

  • Sólo que cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, invadió nuestro país, nos dijimos: "Vamos a Jerusalén para escapar del ejército de los caldeos y del de Siria." Y nos hemos establecido en Jerusalén.» (Jeremías 35, 11)

  • Mientras tanto, Ismael logró escapar de Joanán y con ocho hombres se pasó a los amonitas. (Jeremías 41, 15)

  • Sólo unos pocos, que hayan logrado escapar de la espada, regresarán de Egipto a la tierra de Judá. Entonces todo el resto de la población de Judá, que entraron en Egipto como refugiados, verá qué palabra se ha cumplido, si la mía o la suya. (Jeremías 44, 28)

  • Ni el más ágil podrá escapar, ni el más valiente, salvarse, Al norte, a orillas del río Eufrates, tropezaron y cayeron. (Jeremías 46, 6)

  • Llamen a los arqueros para que ataquen a Babilonia. Ustedes que manejan el arco, pongan sus campamentos alrededor de ella, para que nadie pueda escapar. Páguenle a ella según sus obras; todo lo que ella hizo, hagan con ella, porque se portó insolente con Yavé, con el Santo de Israel. (Jeremías 50, 29)

  • Vi que el carnero atacaba contra el poniente, el norte y el sur. Ningún animal podía resistirle, ni nada escapar a su poder. Hacía lo que le parecía y así se hizo grande. (Daniel 8, 4)

  • No se podrá escapar el hombre rápido, ni demostrar su fuerza el forzudo, ni salvar su vida el valiente. (Amós 2, 14)

  • ¡Ay del que levanta a los suyos con ganancias injustas y coloca su nido tan arriba que así piensa escapar de la desgracia! (Habacuc 2, 9)

  • ¡Serpientes, raza de víboras!, ¿cómo lograrán escapar de la condenación del infierno? (Evangelio según San Mateo 23, 33)


“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina