Encontrados 859 resultados para: Gad

  • Se rebalsa el agua de sus dos baldes, su simiente está bien regada, su rey es más poderoso que Agag, y su reino crece todavía! (Números 24, 7)

  • Hijos de Gad; por clanes: Sefón y el clan sefonita; Jagguí y el clan jaguita; Suní y el clan sunita; (Números 26, 15)

  • Esos eran los clanes de los hijos de Gad. Según el censo eran cuarenta mil quinientos. (Números 26, 18)

  • Está también el caso de una mujer que se casa cuando todavía está ligada por un voto o por una promesa que ha hecho imprudentemente. (Números 30, 7)

  • Pero si su marido se lo anula el mismo día en que se entera, está desligada de su palabra o juramento, de su voto y de sus compromisos. Yavé no se lo tomará en cuenta, pues su marido lo ha desaprobado. (Números 30, 13)

  • Y, de la mitad del botín correspondiente a los hijos de Israel, separarás uno por cada cincuenta, sean hombres, bueyes, burros y ovejas, cualquier clase de animales, y se lo darás a los levitas que están encargados del ministerio de la Morada de Yavé.» (Números 31, 30)

  • Los hijos de Rubén y los hijos de Gad, que tenían muy grandes rebaños, vieron que el país de Yazer y el de Galaad eran tierras buenas para la ganadería. (Números 32, 1)

  • Moisés contestó a los hijos de Gad y a los de Rubén: «¿Acaso nuestros hermanos van a ir al combate mientras ustedes se quedan aquí? (Números 32, 6)

  • Los hijos de Gad y los hijos de Rubén contestaron: «Tus siervos harán como mi señor manda; (Números 32, 25)

  • Moisés dijo: «Si los hijos de Gad y de Rubén pasan con ustedes el Jordán y van armados delante de Yavé, cuando ustedes hayan conquistado el país les darán esta tierra de Galaad en propiedad. (Números 32, 29)

  • Los hijos de Gad y de Rubén contestaron: «Lo que Yavé ha dicho a tus siervos lo haremos. (Números 32, 31)

  • Moisés dio a los hijos de Gad, a los de Rubén y a la media tribu de Manasés, hijo de José, el reino de Sijón, rey de los amorreos, y el reino de Og, rey de Basán. Les dio el país con las ciudades comprendidas en sus fronteras y las ciudades vecinas. (Números 32, 33)


“Padre, eu não acredito no inferno – falou um penitente. Padre Pio disse: Acreditará quando for para lá?” São Padre Pio de Pietrelcina