Encontrados 314 resultados para: Lot y su familia
Allí permaneció tres meses y Yavé bendijo a Obededom y a toda su familia. (2 Samuel 6, 11)
Dijeron al rey que Yavé hacía prosperar la familia de Obededom y todas sus cosas a causa del Arca de Dios. Entonces, David decidió subir el Arca desde la casa de Obededom a la ciudad de David. El transporte se hizo con alegría. (2 Samuel 6, 12)
Cuando David se volvía para bendecir a su familia, Micol, hija de Saúl, le salió al encuentro y le dijo: «¡Qué honor más grande para el rey de Israel haberse hoy mostrado medio desnudo a los ojos de las mujeres de sus servidores, como si fuese un cualquiera!» (2 Samuel 6, 20)
David le respondió: «Yo danzaba en presencia de Yavé. Juro por él, que me prefirió a tu padre y a toda tu familia para hacerme jefe de Israel, su pueblo, que yo volveré a danzar delante de Yavé, (2 Samuel 6, 21)
Ahora, Señor Yavé, guarda siempre la promesa que has hecho a tu siervo y a su familia y actúa como tú lo has dicho. (2 Samuel 7, 25)
Que tu nombre sea glorificado por siempre, y que todos di gan: «Yavé Sebaot es Dios en Israel.» La familia de tu servidor David estará firme ante ti, (2 Samuel 7, 26)
pues tú, Yavé de los ejércitos, Dios de Israel, le ase guraste a tu servidor que no desaparecería su familia. Por eso, tu servidor se ha atrevido a di rigirte esta plegaria. (2 Samuel 7, 27)
Ahora dígnate bendecir la familia de tu sier vo; que tu bendición acompañe siempre a mi fa milia, como tú, Señor Yavé, lo has dicho.» (2 Samuel 7, 29)
Ahora bien, la familia de Saúl tenía un servidor llamado Sibá. Se le llamó al lado de David y el rey le dijo: «¿Eres tú Sibá?» El respondió: «Para servirte.» (2 Samuel 9, 2)
Entonces le preguntó el rey: «¿Queda alguien de la familia de Saúl, para que yo lo trate como juré ante Dios?» Sibá respondió: «Todavía que da un hijo de Jonatán, tullido de ambas pier nas.» (2 Samuel 9, 3)
Después el rey llamó a Sibá, servidor de Saúl, y le dijo: «Todo lo que pertenecía a Saúl y a su familia se lo doy al hijo de tu señor. (2 Samuel 9, 9)
Tú, con tus hijos y tus esclavos, cultivarás las tierras para él, y lo que coseches asegurará el susten to de la familia de tu amo. En cuanto a Mipi baal, el hijo de tu amo, comerá todos los días a mi mesa.» Sibá tenía quince hijos y veinte es clavos, (2 Samuel 9, 10)