Encontrados 1013 resultados para: Moisés y Aarón

  • Pero miren: Moisés les ha dado la circuncisión (aunque en realidad no viene de Moisés sino de los patriarcas) y ustedes hacen la circuncisión incluso en día sábado. (Evangelio según San Juan 7, 22)

  • Un hombre debe recibir la circuncisión, aunque sea sábado, para no quebrantar la ley de Moisés; entonces, ¿por qué se enojan conmigo porque he salvado al hombre entero en día sábado? (Evangelio según San Juan 7, 23)

  • En un caso como éste la Ley de Moisés ordena matar a pedradas a la mujer. Tú ¿qué dices?» (Evangelio según San Juan 8, 5)

  • Entonces comenzaron a insultarlo. «Tú serás discípulo suyo. Nosotros somos discípulos de Moisés. (Evangelio según San Juan 9, 28)

  • Sabemos que a Moisés le habló Dios, pero ése no sabemos ni siquiera de dónde es.» (Evangelio según San Juan 9, 29)

  • Moisés afirmó: El Señor Dios hará qu'un profeta como yo surja de entre sus hermanos. Escuchen todo lo que les diga. (Hecho de los Apóstoles 3, 22)

  • Al no poder resistir a la verdad, sobornaron a unos hombres para que afirmaran: «Hemos oído hablar a este hombre contra Moisés y contra Dios.» (Hecho de los Apóstoles 6, 11)

  • Le hemos oído decir que Jesús el Nazareno destruirá este Lugar Santo y cambiará las costumbres que nos dejó Moisés.» (Hecho de los Apóstoles 6, 14)

  • Fue en ese tiempo cuando nació Moisés, al que Dios amaba. Durante tres meses fue criado en la casa de su padre, (Hecho de los Apóstoles 7, 20)

  • Así Moisés fue educado en toda la sabiduría de los egipcios, (Hecho de los Apóstoles 7, 22)

  • ¿Comprenderían sus hermanos que Dios lo enviaba a ellos como un libertador? Moisés lo creía, pero ellos no lo entendieron. (Hecho de los Apóstoles 7, 25)

  • Al oír esto Moisés huyó y fue a vivir en la tierra de Madián, donde tuvo dos hijos. (Hecho de los Apóstoles 7, 29)


“Reze pelos infiéis, pelos fervorosos, pelo Papa e por todas as necessidades espirituais e temporais da Santa Igreja, nossa terna mãe. E faça uma oração especial por todos os que trabalham para a salvação das almas e para a glória do nosso Pai celeste.” São Padre Pio de Pietrelcina