Encontrados 262 resultados para: Tienda

  • la Morada, su Tienda y su cubierta, sus broches y tablones, sus travesaños, sus postes y sus basas; (Exodo 35, 11)

  • todos aquellos a quienes su corazón movía, hombres de corazón generoso, vinieron a dejar su ofrenda para Yavé, para la construcción de la Tienda de las Citas, para todo su servicio y para las vestiduras sagradas. (Exodo 35, 21)

  • Hicieron asimismo cincuenta broches de oro, con los que se reunieron las cortinas. Así la tienda fue una sola. (Exodo 36, 13)

  • Hizo también la pileta y la basa de bronce, con los espejos de bronce pulido de las mujeres que servían a la entrada de la Tienda de las Citas. (Exodo 38, 8)

  • Con él hizo las basas para la entrada de la Tienda de las Citas, el altar de bronce con su rejilla de bronce también y todos los utensilios del altar, (Exodo 38, 30)

  • Así fue terminada toda la obra de la Morada, es decir, de la Tienda de las Citas; los hijos de Israel hicieron toda la obra conforme a lo que Yavé había mandado a Moisés. (Exodo 39, 32)

  • Entonces presentaron a Moisés la Morada, es decir, la Tienda y todos sus utensilios; los broches, los tablones, los travesaños, los postes y las basas; (Exodo 39, 33)

  • el altar de oro, el óleo de la unción, el incienso aromático y la cortina para la entrada de la tienda; (Exodo 39, 38)

  • el cortinaje del atrio, los postes con sus basas, la cortina para la entrada del atrio, sus cuerdas, clavos y todos los demás utensilios del servicio de la Morada, la Tienda de las Citas; (Exodo 39, 40)

  • «El día primero del primer mes alzarás la Morada, la Tienda de las Citas. (Exodo 40, 2)

  • Colocarás el altar de los holocaustos ante la entrada de la Tienda de las Citas. Pondrás la pila entre la Tienda de las Citas y el Altar y echarás agua en ella. (Exodo 40, 6)

  • Después mandarás que Aarón y sus hijos se acerquen a la entrada de la Tienda de las Citas y los lavarás con agua. (Exodo 40, 12)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina