Encontrados 28 resultados para: espanto

  • Por eso, mis entrañas se estremecen de espanto y el dolor se apodera de mí como de una mujer que da a luz; estoy muy asustado para oír, muy aterrado para ver. (Isaías 21, 3)

  • Ese día, dice Yavé, desfallecerá el corazón del rey y de los jefes; los sacerdotes temblarán de miedo, y los profetas, de espanto. (Jeremías 4, 9)

  • Serán motivo de espanto y de vergüenza para todos los reinos de la tierra; se reirán y se burlarán de ellos, serán como un ejemplo de maldición en todos los países adonde los echaré. (Jeremías 24, 9)

  • voy a mandar a buscar a una nación del norte, dice Yavé, y la echaré contra este país y sus habitantes; los maldeciré y los convertiré para siempre en motivo de espanto, de burla y de vergüenza. (Jeremías 25, 9)

  • (A Jerusalén y a las ciudades de Judá, sus reyes y sus príncipes, para que queden hechos una ruina, un espanto, una payasada, una maldición, como les está ocurriendo ahora.) (Jeremías 25, 18)

  • ¿Cómo es posible que Moab haya sido destruido y que, humillado, haya tenido que volver la espalda? ¿Por qué Moab se ha convertido en objeto de burla y de espanto para todos sus vecinos? (Jeremías 48, 39)

  • Así, pues, escuchen la decisión que Yavé ha tomado contra Edom y sus proyectos contra los habitantes de Temán: Sí, hasta las ovejas más flacas serán llevadas a la rastra, y, al verlo, el rebaño se estremecerá de espanto. (Jeremías 49, 20)

  • Sobre Damasco. Jamat y Arfad están preocupadas porque recibieron una mala noticia. Se les para el corazón de espanto y no pueden tranquilizarse. (Jeremías 49, 23)

  • El rey estará de duelo, colmado de espanto,a los nobles les temblarán las manos;los trataré de acuerdo a su comportamiento, tendrán la sentencia que se mereceny sabrán que yo soy Yavé. (Ezequiel 7, 27)

  • Las naciones se conmovieron de espanto ante el estruendo de su caída, cuando lo hice descender a la morada de los muertos con los que bajan a la tumba. Pero en el país subterráneo, se consolaron todos los árboles del Edén, los más bellos del Líbano y los mejor regados. (Ezequiel 31, 16)

  • Cuando Efraím hablaba, todos temblaban de espanto, pues era poderoso en Israel; pero decayó apenas se puso a pecar con el Baal. (Oseas 13, 1)

  • Vi que cundía el miedo en las tiendas de Cusán; que temblaban de espanto las carpas de Madián. (Habacuc 3, 7)


“Proponha-se a exercitar-se nas virtudes”. São Padre Pio de Pietrelcina