Encontrados 592 resultados para: lista de reyes derrotados por josué
Como los reyes de Judá han tratado de ensanchar sus dominios, mi furor los va a llevar como un torrente. (Oseas 5, 10)
Todos se enardecen como un horno y devoran a sus gobernantes. Así han perecido todos sus reyes sin que ninguno de ellos me pidiera auxilios. (Oseas 7, 7)
Se han elegido reyes sin que esto viniera de mí; se han dado jefes que yo no conocía. Con su oro y su plata se han fabricado ídolos, y yo se los quitaré. (Oseas 8, 4)
Sin embargo, por más que se hayan hecho amigos en las naciones, pronto los voy a dispersar y dentro de poco no podrán ungir más reyes ni príncipes. (Oseas 8, 10)
Dejen que hablen, y que juren en falso, y que celebren convenios, pues su sentencia está lista para florecer, como hace la hierba mala entre los surcos de los sembrados. (Oseas 10, 4)
Estas fueron las palabras de Yavé a Miqueas de Moreset en tiempos de Jotam, Ajaz y Ezequías, reyes de Judá; y éstas, sus visiones sobre Samaria y Jerusalén. (Miqueas 1, 1)
Por eso tú deberás pagar una fianza por Moreset-Gat. Betaksib será una trampa para los reyes de Israel. (Miqueas 1, 14)
Este pueblo se burla de los reyes, se ríe de los soberanos; no le importan las ciudades fortificadas, pues levanta terraplenes y se apodera de ellas. (Habacuc 1, 10)
Sus reyes en medio de ella son como leones que rugen; sus gobernantes son como lobos nocturnos que no guardan ni un hueso para el día siguiente. (Sofonías 3, 3)
En el segundo año del reinado de Darío, el primer día del sexto mes, la palabra de Yavé fue dirigida por medio del profeta Ageo a Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judá, y a Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, para que les dijera: (Ageo 1, 1)
Ahora bien, Zorobabel, hijo de Sealtiel, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y todo el pueblo, escucharon estas palabras de Yavé su Dios que les hablaba por medio del profeta Ageo, pues hablaba por encargo de Yavé, su Dios. Y el pueblo se llenó de respeto a Dios. (Ageo 1, 12)
Entonces Yavé tocó el corazón de Zorobabel, de Josué y de todo el pueblo, quienes empezaron la reconstrucción de la Casa de Yavé de los Ejércitos, su Dios. (Ageo 1, 14)