Encontrados 78 resultados para: matrimonio de Tobías

  • ¡Bendito sea Dios! ¡Bendito su gran Nombre! ¡Benditos todos sus ángeles! ¡Bendito sea su Nombre para siempre, porque me castigó, pero tuvo piedad, y ahora veo a mi hijo Tobías! (Tobías 11, 14)

  • Tobías entró muy contento, bendiciendo al Señor. Luego contó al padre el éxito de su viaje, cómo consiguió el dinero, y su matrimonio con Sara, hija de Ragüel, que venía ya cerca de las puertas de Nínive. (Tobías 11, 15)

  • Tobit llamó a su hijo Tobías y le dijo: «Hijo mío, es necesario que pagues su sueldo al hombre que te acompañó. (Tobías 12, 1)

  • Y debemos añadir algo más.» Respondió Tobías: «Padre, no es demasiado si le doy la mitad de lo que traje. (Tobías 12, 2)

  • Cuando estaba cercano a la muerte, llamó a Tobías y le dijo: (Tobías 14, 3)

  • Cuando murió su madre, Tobías la enterró junto a su padre. Entonces, él y su familia se dirigieron a Media y se quedaron a vivir en Ecbátana junto a Ragüel. (Tobías 14, 12)

  • Muchos le ofrecieron matrimonio, pero no aceptó a nadie desde que murió su esposo Manasés, y fue a reunirse con su pueblo. (Judit 16, 22)

  • Una parte pertenecía a Hircano, hijo de Tobías, personaje de muy alta posición, al que también alcanzaban estas calumnias. De todas maneras, el tesoro era de cuatrocientos talentos de plata y doscientos de oro. (2 Macabeos 3, 11)

  • Y sin embargo, ya sea que se trate de sus negocios, ya sea de su matrimonio o de sus hijos, no se avergüenza de dirigirle la palabra a esa cosa sin vida. ¡Para tener salud invoca a un objeto sin fuerza; (Sabiduría 13, 17)

  • Ni el más mínimo recato en sus vidas o en su matrimonio: uno suprime al otro a traición o lo deshonra por medio del adulterio. (Sabiduría 14, 24)

  • confusión en la gente buena, olvido de los favores, escándalos, prácticas antinaturales, desórdenes en el matrimonio, adulterio, libertinaje. (Sabiduría 14, 26)

  • «Recoge de manos de Helday, de Tobías y de Jedaya las ofrendas de los que han vuelto del destierro, y dirígete hoy mismo a casa de Josías, hijo de Sefanías, que ha regresado de Babilonia. (Zacarías 6, 10)


“Pense em Jesus flagelado por amor a você, e ofereça com generosidade um sacrifício a Ele”. São Padre Pio de Pietrelcina