Encontrados 338 resultados para: persecución de Saúl
Los gabaonitas respondieron: «No tenemos queja contra Saúl y su familia por asunto de oro o de plata; tampoco queremos que muera nadie de Israel.» David insistió: «Haré por ustedes lo que me digan.» (2 Samuel 21, 4)
Pero a Mipibaal y a Armoní, los dos hijos de Risfá y Saúl, y a los cinco hijos que Merob, la hija de Saúl, había tenido de Adriel, (2 Samuel 21, 8)
Cuando supo David lo que había hecho Risfá, concubina de Saúl, (2 Samuel 21, 11)
fue a Jabés de Galaad a pedirles los huesos de Saúl y de su hijo Jonatán a las autoridades de la ciudad. Ellos, en efecto, los habían retirado de los muros de Bet-San, donde los habían colgado los filisteos el día que mataron a Saúl en Gelboé. (2 Samuel 21, 12)
Desde allí subió los huesos de Saúl y de su hijo Jonatán y los juntó con los huesos de los que habían sido colgados. (2 Samuel 21, 13)
Todos juntos fueron sepultados en tierra de Benjamín, en Selá, en el sepulcro de Quis, padre de Saúl. Se hizo todo lo que el rey había ordenado, y después de esto Dios tuvo piedad del país. (2 Samuel 21, 14)
David dirigió a Yavé las palabras de este cántico cuando éste lo libró de Saúl y de todos sus enemigos. Dijo: (2 Samuel 22, 1)
Al ver esto Ocozías, rey de Judá, huyó por el camino de Bet-Hagan. Jehú partió en su persecución, gritando: «Mátenlo también a él.» Lo hirieron en su carro en la cuesta de Gur, cerca de Jibleam; alcanzó a refugiarse en Meguido y allí murió. (2 Reyes 9, 27)
Murió Samlá y reinó en su lugar Saúl, de Rejobot-han-Nahar. (1 Crónicas 1, 48)
Murió Saúl y reinó en su lugar Baal-Janán, hijo de Acbor. (1 Crónicas 1, 49)
Hijos de Simeón: Nemuel, Yanun, Yarib, Zéraj y Saúl. (1 Crónicas 4, 24)
En los días de Saúl hicieron guerra contra los agareos, que cayeron en sus manos; y habitaron en sus tiendas por toda la parte oriental de Galaad. (1 Crónicas 5, 10)