Encontrados 40 resultados para: provincias

  • Mardoqueo puso por escrito estos hechos. Luego envió cartas a todos los judíos que vivían en las diversas provincias del imperio, estuvieran lejos o cerca. (Ester 9, 20)

  • Las cartas fueron despachadas a todos los judíos de las ciento veintisiete provincias del imperio, ordenándoles, con palabras de paz y de amistad, (Ester 9, 30)

  • La carta enviada a todo el imperio decía: «El gran rey Asuero les escribe a sus súbditos, a los gobernadores de las ciento veintisiete provincias y a los jefes de distrito de su imperio, que se extiende desde la India a Etiopía: (Ester 13, 1)

  • El texto de la carta enviada por Mardoqueo a nombre del rey, decía: «El gran rey Asuero a los gobernantes de las ciento veintisiete provincias que se extienden desde la India a Etiopía y a todos sus leales súbditos, salud: (Ester 16, 1)

  • Te alabaré, Señor, entre los pueblos, te cantaré en todas las provincias, (Salmos 57, 10)

  • Te alabaré, Señor, entre los pueblos, tocaré para ti en las provincias, (Salmos 108, 4)

  • Reunió un ejército muy poderoso y ejerció el mando sobre provincias, naciones y príncipes, que le pagaban tributo. (1 Macabeos 1, 4)

  • El rey comunicó esta obligación a todas sus provincias y los inspectores nombrados por él recorrieron el país de Judea. Debían procurar que se ofrecieran sacrificios en todas las ciudades. (1 Macabeos 1, 51)

  • Se encontró muy apurado y decidió ir a Persia a cobrar los tributos de aquellas provincias y reunir mucho dinero. (1 Macabeos 3, 31)

  • El rey, tomando la otra mitad del ejército, partió de Antioquía, capital del reino, el año ciento cuarenta y siete. Atravesó el río Eufrates y continuó su marcha a través de las provincias superiores. (1 Macabeos 3, 37)

  • Envía, pues, a una persona de tu confianza para que vea los estragos que nos han causado a nosotros y a las provincias del rey. Que los castiguen a ellos y a todos los que los apoyan.» (1 Macabeos 7, 7)

  • estuvo obligado a pagar él y sus sucesores un impuesto muy importante, dar rehenes y ceder algunas de sus mejores provincias, (1 Macabeos 8, 7)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina