Encontrados 5339 resultados para: pueblo de Dios

  • y por eso, cuando amamos a Dios y cumplimos sus mandatos, con toda certeza sabemos que amamos a los hijos de Dios. (1º Carta de Juan 5, 2)

  • Amar a Dios es guardar sus mandatos, y sus mandatos no son pesados. (1º Carta de Juan 5, 3)

  • Todo lo que ha nacido de Dios vence al mundo, y la victoria en que el mundo ha sido vencido es nuestra fe. (1º Carta de Juan 5, 4)

  • ¿Quién ha vencido al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios? (1º Carta de Juan 5, 5)

  • Si aceptamos el testimonio de los hombres, mucha más fuerza tiene el testimonio de Dios, y hay un testimonio de Dios, una declaración suya a favor de su Hijo. (1º Carta de Juan 5, 9)

  • Quien cree en el Hijo de Dios está guardando en sí la declaración de Dios. Quien no cree, hace a Dios mentiroso, ya que no cree al testimonio de Dios en favor de su Hijo. (1º Carta de Juan 5, 10)

  • Pues bien, este es el testimonio: que Dios nos ha dado la vida eterna, y que dicha vida está en su Hijo. (1º Carta de Juan 5, 11)

  • El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene la vida. (1º Carta de Juan 5, 12)

  • Les he escrito, pues, a ustedes que creen en el Nombre del Hijo de Dios, para que sepan que tienen vida eterna. (1º Carta de Juan 5, 13)

  • Si alguno ve a su hermano en el pecado, -un pecado que no ha traído la muerte-, ore por él y Dios le dará vida. (Hablo de esos pecadores cuyo pecado no es para la muerte). Porque también hay un pecado que lleva a la muerte, y no pido oraciones en este caso. (1º Carta de Juan 5, 16)

  • Sabemos que el que ha nacido de Dios no peca, pues lo protege lo que en él ha nacido de Dios, y el Maligno no puede tocarlo. (1º Carta de Juan 5, 18)

  • Sabemos que somos de Dios, mientras el mundo entero está bajo el poder del Maligno. (1º Carta de Juan 5, 19)


“De todos os que vierem pedir meu auxílio, nunca perderei nenhum!” São Padre Pio de Pietrelcina