Encontrados 24 resultados para: rasgó

  • Miró, y vio al rey junto a la columna, a la entrada, y a los jefes y las trompetas junto al rey, a todo el pueblo lleno de alegría que tocaba las trompetas, y a los cantores que, con instrumentos de música, dirigían los cánticos de alabanza. Entonces Atalía rasgó sus vestidos y gritó: «¡Traición, traición!» (2 Crónicas 23, 13)

  • Cuando el rey escuchó las palabras de la Ley, rasgó sus vestidos (2 Crónicas 34, 19)

  • Gritó muy fuerte y rasgó sus ropas. (Judit 14, 16)

  • Apenas supo Mardoqueo lo que estaba pasando, rasgó su traje, se puso un saco y se echó ceniza en la cabeza. Luego salió a recorrer la ciudad, lanzando gritos desgarradores. (Ester 4, 1)

  • Entonces Job se levantó y rasgó su manto. Luego se cortó el pelo al rape, se tiró al suelo y, echado en tierra, (Job 1, 20)

  • Jonatán rasgó sus vestiduras, se echó tierra sobre su cabeza y rezó. (1 Macabeos 11, 71)

  • Cuando terminaron de hablar, el rey Ezequías rasgó también su ropa, se puso un saco y se fue a la Casa de Yavé. (Isaías 37, 1)

  • Entonces el sumo sacerdote se rasgó las ropas, diciendo: «¡Ha blasfemado! ¿Para qué necesitamos más testigos? Ustedes mismos acaban de oír estas palabras blasfemas. (Evangelio según San Mateo 26, 65)

  • En ese mismo instante la cortina del Santuario se rasgó de arriba abajo, en dos partes. (Evangelio según San Mateo 27, 51)

  • El Sumo Sacerdote rasgó sus vestiduras horrorizado y dijo: «¿Para qué queremos ya testigos? (Evangelio según San Marcos 14, 63)

  • En seguida la cortina que cerraba el santuario del Templo se rasgó en dos, de arriba abajo. (Evangelio según San Marcos 15, 38)

  • En ese momento la cortina del Templo se rasgó por la mitad, (Evangelio según San Lucas 23, 45)


“Devo fazer somente a vontade de Deus e, se lhe agrado, o restante não conta.” São Padre Pio de Pietrelcina