Encontrados 912 resultados para: árbol de la vida

  • Entonces el Señor Dios modeló al hombre con arcilla del suelo y sopló en su nariz un aliento de vida. Así el hombre se convirtió en un ser viviente. (Génesis 2, 7)

  • Y el Señor Dios hizo brotar del suelo toda clase de árboles, que eran atrayentes para la vista y apetitosos para comer; hizo brotar el árbol de la vida en medio del jardín, y el árbol del conocimiento del bien y del mal. (Génesis 2, 9)

  • exceptuando únicamente el árbol del conocimiento del bien y del mal. De él no deberás comer, porque el día que lo hagas quedarás sujeto a la muerte". (Génesis 2, 17)

  • La serpiente era el más astuto de todos los animales del campo que el Señor Dios había hecho, y dijo a la mujer: "¿Así que Dios les ordenó que no comieran de ningún árbol del jardín?". (Génesis 3, 1)

  • Pero respecto del árbol que está en medio del jardín, Dios nos ha dicho: 'No coman de él ni lo toquen, porque de lo contrario quedarán sujetos a la muerte'". (Génesis 3, 3)

  • Dios sabe muy bien que cuando ustedes coman de ese árbol, se les abrirán los ojos y serán como dioses, conocedores del bien y del mal". (Génesis 3, 5)

  • Cuando la mujer vio que el árbol era apetitoso para comer, agradable a la vista y deseable para adquirir discernimiento, tomó de su fruto y comió; luego se lo dio a su marido, que estaba con ella, y él también comió. (Génesis 3, 6)

  • Él replicó: "¿Y quién te dijo que estabas desnudo? ¿Acaso has comido del árbol que yo te prohibí?". (Génesis 3, 11)

  • Y el Señor Dios dijo a la serpiente: "Por haber hecho esto, maldita seas entre todos los animales domésticos y entre todos los animales del campo. Te arrastrarás sobre tu vientre, y comerás polvo todos los días de tu vida. (Génesis 3, 14)

  • Y dijo al hombre: "Porque hiciste caso a tu mujer y comiste del árbol que yo te prohibí, maldito sea el suelo por tu culpa. Con fatiga sacarás de él tu alimento todos los días de tu vida. (Génesis 3, 17)

  • Después el Señor Dios dijo: "El hombre ha llegado a ser como uno de nosotros en el conocimiento del bien y del mal. No vaya a ser que ahora extienda su mano, tome también del árbol de la vida, coma y viva para siempre". (Génesis 3, 22)

  • Y después de expulsar al hombre, puso al oriente del jardín de Edén a los querubines y la llama de la espada zigzagueante, para custodiar el acceso al árbol de la vida. (Génesis 3, 24)


“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina