Encontrados 2431 resultados para: Cam

  • Después compró a los hijos de Jamor, el padre de Siquém, por cien monedas de plata, la parcela de campo donde había instalado su campamento. (Génesis 33, 19)

  • Jacob, por su parte, se enteró de que Siquém había violado a su hija Dina, pero como sus hijos estaban en el campo, cuidando el ganado, no dijo nada hasta su regreso. (Génesis 34, 5)

  • En ese momento, volvieron del campo los hijos de Jacob, y cuanto tuvieron noticia de lo ocurrido, se disgustaron profundamente y se enfurecieron, porque al abusar de la hija de Jacob, Siquém había cometido una infamia contra Israel, y eso no se debe hacer. (Génesis 34, 7)

  • Conviértanse en parientes nuestros: ustedes nos darán a sus hijas, y obtendrán en cambio las nuestras. (Génesis 34, 9)

  • Aunque me exijan a cambio de ella un precio muy elevado, les pagaré lo que ustedes digan. Pero dejen que me case con la muchacha". (Génesis 34, 12)

  • "Estos hombres son nuestros amigos. Dejen que se instalen en el país y que puedan recorrerlo libremente; aquí hay bastante espacio para ellos. Nosotros nos casaremos con sus hijas, y les daremos en cambio a las nuestras. (Génesis 34, 21)

  • Pero esta gente accederá a permanecer con nosotros y a formar un solo pueblo, únicamente con esta condición: que todos nuestros varones se hagan circuncidar, igual que ellos. (Génesis 34, 22)

  • Entonces Jacob dijo a sus familiares y a todos los demás que estaban con él: "Dejen de lado todos los dioses extraños que tengan con ustedes, purifíquense y cámbiense de ropa. (Génesis 35, 2)

  • Así murió Raquel, y fue enterrada junto al camino de Efratá, o sea, de Belén. (Génesis 35, 19)

  • Israel siguió avanzando, y estableció su campamento más allá de Migdal Eder. (Génesis 35, 21)

  • Mientras acampaba en aquella región, Rubén se acostó con Bilhá, la concubina de su padre, e Israel se enteró. Jacob tuvo doce hijos. (Génesis 35, 22)

  • Cuando murió Jusám, lo sucedió Hadad, hijo de Bedad, el que derrotó a Madián en el campo de Moab; el nombre de su ciudad era Avit. (Génesis 36, 35)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina