Encontrados 445 resultados para: Dinero del Templo

  • Entonces el Señor envió un ángel que aniquiló a todos los guerreros valientes, a los jefes y a los oficiales en el campamento del rey de Asiria. Este tuvo que volver a su país, completamente avergonzado, y allí, al entrar en el templo de su dios, algunos de sus hijos lo asesinaron. (II Crónicas 32, 21)

  • Ellos se presentaron a Jilquías, el sumo sacerdote, y le entregaron el dinero recaudado para la Casa de Dios, que los levitas guardianes del umbral habían recogido de Manasés, de Efraím y de todo el resto de Israel, de todo Judá y Benjamín, y de los habitantes de Jerusalén. (II Crónicas 34, 9)

  • Luego ese dinero se puso en manos de los que dirigían los trabajos, de los encargados de supervisar la Casa del Señor, y ellos lo entregaron a los que ejecutaban las obras que se hacían en la Casa del Señor, para restaurar y reparar el edificio. (II Crónicas 34, 10)

  • Mientras retiraban el dinero recaudado para la Casa del Señor, el sacerdote Jilquías encontró el libro de la Ley promulgada por Moisés. (II Crónicas 34, 14)

  • Luego dijo a los levitas que instruían a todo Israel y estaban consagrados al Señor: "Pongan el Arca santa en el Templo que edificó Salomón, hijo de David, rey de Israel: ya no tendrán que llevarla sobre los hombros. Ahora sirvan al Señor, su Dios, y a su pueblo Israel. (II Crónicas 35, 3)

  • Después de todo esto, cuando Josías ya había reorganizado el culto del Templo, subió Necao, rey de Egipto, para combatir en Carquemís, junto al río Éufrates. Josías le salió al paso, (II Crónicas 35, 20)

  • De la misma manera, todos los jefes de Judá, los sacerdotes y el pueblo multiplicaron sus infidelidades, imitando todas las abominaciones de los paganos, y contaminaron el Templo que el Señor se había consagrado en Jerusalén. (II Crónicas 36, 14)

  • El rey Ciro mandó tomar los utensilios de la Casa del Señor que Nabucodonosor había llevado desde Jerusalén y había depositado en el templo de su dios. (Esdras 1, 7)

  • Empleados del Templo: los hijos de Sijá, los hijos de Jasufá, los hijos de Tabaot, (Esdras 2, 43)

  • El total de los empleados del Templo y de los hijos de los servidores de Salomón: 392. (Esdras 2, 58)

  • Los sacerdotes, los levitas y una parte del pueblo se establecieron en Jerusalén; los cantores, los porteros, los empleados del Templo y todos los otros israelitas se instalaron en sus respectivas ciudades. (Esdras 2, 70)

  • Desde el primer día del séptimo mes, se comenzó a ofrecer holocaustos al Señor, cuando todavía no se habían puesto los cimientos del Templo del Señor. (Esdras 3, 6)


“Peçamos a São José o dom da perseverança até o final”. São Padre Pio de Pietrelcina