Encontrados 77 resultados para: Fuerzas
Mientras tanto, iré a buscar un trozo de pan, para que ustedes reparen sus fuerzas antes de seguir adelante. ¡Por algo han pasado junto a su servidor!". Ellos respondieron: "Está bien. Puedes hacer lo que dijiste". (Génesis 18, 5)
Entonces agotarán sus fuerzas en vano, porque la tierra no dará sus productos ni las plantas del campo, sus frutos. (Levítico 26, 20)
Yo solo no puedo soportar el peso de todo este pueblo: mis fuerzas no dan para tanto. (Números 11, 14)
Sijón no permitió que Israel pasara por su territorio, sino que reunió todas sus fuerzas y fue a combatir contra Israel en el desierto. Cuando llegó a Iahás, presentó batalla a Israel, (Números 21, 23)
Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas. (Deuteronomio 6, 5)
cómo te salió al paso y atacó por la espalda a todos los que se habían quedado a la retaguardia, agotados por el cansancio. Entonces tú estabas fatigado y sin fuerzas, pero él no tuvo temor de Dios. (Deuteronomio 25, 18)
Este mandamiento que hoy te prescribo no es superior a tus fuerzas ni está fuera de tu alcance. (Deuteronomio 30, 11)
Al cuarto día, se levantaron de madrugada y el levita se dispuso a partir. Pero el padre de la joven dijo a su yerno: "Repara tus fuerzas con un pedazo de pan, y luego partirán". (Jueces 19, 5)
Al quinto día, se dispuso a partir de madrugada, pero su suegro le dijo: "Repara antes tus fuerzas". Y se entretuvieron, comiendo los dos juntos hasta muy avanzado el día. (Jueces 19, 8)
Los filisteos reunieron sus fuerzas para el combate. Se concentraron en Socó de Judá y acamparon entre Socó y Azecá, en Efes Damím. (I Samuel 17, 1)
En aquellos días, los filisteos concentraron sus fuerzas para entrar en batalla y combatir contra Israel. Aquís dijo a David: "Tienes que saber que irás conmigo al frente, tú y tus hombres". (I Samuel 28, 1)
Al instante, Saúl se desplomó en tierra cuan largo era, aterrorizado por lo que había dicho Samuel. Además, estaba sin fuerzas porque no había comido nada en todo el día y toda la noche. (I Samuel 28, 20)