Encontrados 988 resultados para: La fuga de David

  • Pero él les respondió: «¿No han leído lo que hizo David, cuando él y sus compañeros tuvieron hambre, (Mateo 12, 3)

  • La multitud, asombrada, decía: «¿No será este el Hijo de David?». (Mateo 12, 23)

  • Entonces una mujer cananea, que salió de aquella región, comenzó a gritar: «¡Señor, Hijo de David, ten piedad de mí! Mi hija está terriblemente atormentada por un demonio». (Mateo 15, 22)

  • Había dos ciegos sentados al borde del camino y, al enterarse de que pasaba Jesús, comenzaron a gritar: «¡Señor, Hijo de David, ten piedad de nosotros!». (Mateo 20, 30)

  • La multitud los reprendía para que se callaran, pero ellos gritaban más: «¡Señor, Hijo de David, ten piedad de nosotros!». (Mateo 20, 31)

  • La multitud que iba delante de Jesús y la que lo seguía gritaba: «¡Hosana alHijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanaen las alturas!». (Mateo 21, 9)

  • Al ver los prodigios que acababa de hacer y a los niños que gritaban en el Templo: «¡Hosana al Hijo de David!», los sumos sacerdotes y los escribas se indignaron (Mateo 21, 15)

  • «¿Qué piensan acerca del Mesías? ¿De quién es hijo?». Ellos le respondieron: «De David». (Mateo 22, 42)

  • Jesús les dijo: «¿Por qué entonces, David, movido por el Espíritu, lo llama "Señor", cuando dice: (Mateo 22, 43)

  • Si David lo llama "Señor", ¿cómo puede ser hijo suyo?». (Mateo 22, 45)

  • Él les respondió: «¿Ustedes no han leído nunca lo que hizo David, cuando él y sus compañeros se vieron obligados por el hambre, (Marcos 2, 25)

  • Al enterarse de que pasaba Jesús, el Nazareno, se puso a gritar: «¡Jesús, Hijo de David, ten piedad de mí!». (Marcos 10, 47)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina