Encontrados 29 resultados para: Vecinas

  • Judas mandó a explorar el campamento y le dieron este informe: "Todas las naciones vecinas se han unido a Timoteo y forman un ejército muy numeroso. (I Macabeos 5, 38)

  • Jonatán incendió a Azoto y a las ciudades vecinas y se apoderó del botín. También incendió el templo de Dagón, con todos los que se habían refugiado en él. (I Macabeos 10, 84)

  • Simón, por su parte, hizo una expedición hasta Ascalón y las fortalezas vecinas. Se volvió luego hacia Jope y la tomó, (I Macabeos 12, 33)

  • Menelao, pensando que se le había presentado una ocasión favorable, se apropió de unos objetos de oro del Templo y se los regaló a Andrónico, y también vendió otros en Tiro y en las ciudades vecinas. (II Macabeos 4, 32)

  • Iojanán, hijo de Caréaj, y todos los jefes de las tropas tomaron a todo el resto de Judá, a los que habían vuelto a residir en el país de Judá, después de haber sido dispersados entre las naciones vecinas: (Jeremías 43, 5)

  • Como en la catástrofe de Sodoma y Gomorra, y de sus ciudades vecinas -dice el Señor- allí no habitará más ningún hombre, no residirá ningún ser humano. (Jeremías 49, 18)

  • Como cuando Dios provocó la catástrofe de Sodoma y Gomorra y de sus ciudades vecinas -oráculo del Señor- allí no habitará más ningún hombre, no residirá ningún ser humano. (Jeremías 50, 40)

  • Porque ella, al ver que la ira del Señor se desencadenaba contra ustedes, exclamó: "Escuchen, ciudades vecinas de Sión: Dios me ha enviado un gran dolor. (Baruc 4, 9)

  • ¡Que vengan las vecinas de Sión, y recuerden el cautiverio que el Eterno infligió a mis hijos y a mis hijas! (Baruc 4, 14)

  • Así como ahora las ciudades vecinas de Sión están viendo el cautiverio de ustedes, así verán pronto la salvación que les llegará de Dios, con la gran gloria y el esplendor del Eterno. (Baruc 4, 24)

  • antes que fuera descubierta tu desnudez? Lo mismo que ella, tú eres ahora objeto de burla para las ciudades de Edóm y de todas sus vecinas, y para las ciudades de los filisteos, que se burlan de ti en tus alrededores. (Ezequiel 16, 57)

  • Por eso, montañas de Israel, escuchen la palabra del Señor: Así habla el Señor a las montañas, a las colinas, a los cauces de los torrentes y a los valles, a las ruinas desiertas y a las ciudades abandonadas, que han sido saqueadas y escarnecidas por el resto de las naciones vecinas. (Ezequiel 36, 4)


“Somente por meio de Jesus podemos esperar a salvação.” São Padre Pio de Pietrelcina