Encontrados 21 resultados para: comiendo
Así, cuando ustedes siembren en el octavo año, todavía estarán comiendo el grano de aquella cosecha; y lo seguirán comiendo hasta el noveno, hasta que llegue la cosecha. (Levítico 25, 22)
Lo recogió con su mano, y fue comiendo miel mientras caminaba. Cuando llegó adonde estaban su padre y su madre, les ofreció miel, y ellos comieron; pero no les dijo que la había sacado del cadáver del león. (Jueces 14, 9)
Al quinto día, se dispuso a partir de madrugada, pero su suegro le dijo: "Repara antes tus fuerzas". Y se entretuvieron, comiendo los dos juntos hasta muy avanzado el día. (Jueces 19, 8)
Luego añadió: "Dispérsense entre el pueblo y díganle que me traiga cada uno su buey o su oveja. Degüéllenlos aquí y coman; pero no pequen contra el Señor comiendo carne con sangre". Esa noche, cada uno llevó el buey que tenía a mano y lo degollaron en aquel lugar. (I Samuel 14, 34)
El muchacho lo guió, y encontraron a los amalecitas desparramados por toda la comarca, comiendo, bebiendo y festejando por el gran botín que habían recogido en el país de los filisteos y en el país de Judá. (I Samuel 30, 16)
Porque hoy bajó a sacrificar una gran cantidad de bueyes, de terneros cebados y de corderos, e invitó a todos los hijos del rey, a los jefes del ejército y al sacerdote Ebiatar. Ahora están comiendo y bebiendo delante de él, y lo han aclamado: ¡Viva el rey Adonías! (I Reyes 1, 25)
Durante tres días, permanecieron allí, comiendo y bebiendo con David, porque sus hermanos los habían provisto de víveres. (I Crónicas 12, 40)
Hizo llamar a Tobías y le dijo: "Durante catorce días no te moverás de este lugar. Te quedarás aquí, comiendo y bebiendo conmigo, y alegrando a mi hija que ha sufrido tanto. (Tobías 8, 20)
El día en que sus hijos e hijas estaban comiendo y bebiendo en la casa del hermano mayor, (Job 1, 13)
Mientras Jesús estaba comiendo en la casa, acudieron muchos publicanos y pecadores, y se sentaron a comer con él y sus discípulos. (Mateo 9, 10)
se acercó una mujer con un frasco de alabastro, que contenía un perfume valioso, y lo derramó sobre su cabeza, mientras él estaba comiendo. (Mateo 26, 7)
Mientras Jesús estaba comiendo en su casa, muchos publicanos y pecadores se sentaron a comer con él y sus discípulos; porque eran muchos los que lo seguían. (Marcos 2, 15)