Encontrados 45 resultados para: habitación

  • "Dame a tu hijo", respondió Elías. Luego lo tomó del regazo de su madre, lo subió a la habitación alta donde se alojaba y lo acostó sobre su lecho. (I Reyes 17, 19)

  • Elías tomó al niño, lo bajó de la habitación alta de la casa y se lo entregó a su madre. Luego dijo: "Mira, tu hijo vive". (I Reyes 17, 23)

  • Miqueas repuso: "Eso lo verás el día en que vayas de una habitación a otra para esconderte". (I Reyes 22, 25)

  • Vamos a construirle una pequeña habitación en la terraza; le pondremos allí una cama, una mesa, una silla y una lámpara, y así, cuando él venga, tendrá donde alojarse". (II Reyes 4, 10)

  • Un día Eliseo llegó por allí, se retiró a la habitación de arriba y se acostó. (II Reyes 4, 11)

  • Cuando llegues, busca allí a Jehú, hijo de Josafat, hijo de Nimsí. Luego entra, sácalo de en medio de sus camaradas y llévalo a la habitación más retirada. (II Reyes 9, 2)

  • Suprimió los caballos que los reyes de Judá habían dedicado al sol, a la entrada de la Casa del Señor, hacia la habitación del eunuco Natán Mélec, en los anexos, y quemó el carro del sol. (II Reyes 23, 11)

  • El rey derribó los altares que estaban sobre las terrazas de la habitación alta de Ajaz, construidos por los reyes de Judá, y también los que había hecho Manasés en los dos atrios de la Casa del Señor; allí mismo los destrozó y arrojó el polvo en el torrente Cedrón. (II Reyes 23, 12)

  • Miqueas repuso: "Eso lo verás el día en que vayas de una habitación a otra para esconderte". (II Crónicas 18, 24)

  • Esdras se alejó de la Casa de Dios y se dirigió a la habitación de Iojanán, hijo de Eliasib, donde pasó la noche sin comer ni beber, porque estaba afligido a causa de la traición de los repatriados. (Esdras 10, 6)

  • Después de él trabajó Malquías, del gremio de los orfebres, hasta la casa de los empleados del Templo y de los comerciantes, frente a la puerta de la Inspección y hasta la habitación alta del Ángulo. (Nehemías 3, 31)

  • Y entre la habitación alta del Ángulo y la puerta de las Ovejas, trabajaron los orfebres y los comerciantes. (Nehemías 3, 32)


“Se quisermos colher é necessário não só semear, mas espalhar as sementes num bom campo. Quando as sementes se tornarem plantas, devemos cuidá-las para que as novas plantas não sejam sufocadas pelas ervas daninhas.” São Padre Pio de Pietrelcina