Encontrados 269 resultados para: lavar los pies

  • Inmediatamente, ellos tomaron cada uno su manto y los tendieron a sus pies, encima de las gradas. Luego tocaron la trompeta y gritaron: "¡Jehú es rey!". (II Reyes 9, 13)

  • Pero cuando fueron a sepultarla, no encontraron más que el cráneo, los pies y las manos. (II Reyes 9, 35)

  • Excavé pozos y bebí aguas extranjeras; sequé con la planta de mis pies todos los canales de Egipto’. (II Reyes 19, 24)

  • El rey David se puso de pie y dijo: "Óiganme, hermanos y pueblo mío. Yo me había propuesto construir una Casa donde descansara el Arca de la Alianza del Señor, que es la tarima de los pies de nuestro Dios, y había hecho preparativos para su construcción. (I Crónicas 28, 2)

  • Así, las alas desplegadas de los dos querubines medían diez metros. Ellos estaban erguidos sobre sus pies, con el rostro vuelto hacia el interior. (II Crónicas 3, 13)

  • En el trigésimo noveno año de su reinado, Asá se enfermó gravemente de los pies. Pero ni siquiera en su enfermedad recurrió al Señor, sino a los médicos. (II Crónicas 16, 12)

  • Abriste ante ellos el mar, y ellos lo cruzaron sin mojarse los pies; pero a sus perseguidores los hundiste en el abismo, como una piedra en las aguas caudalosas. (Nehemías 9, 11)

  • Cuarenta años los sustentaste en el desierto y nunca les faltó nada: no se gastaron sus vestidos ni se les hincharon los pies. (Nehemías 9, 21)

  • El joven bajó a lavarse los pies en el río, y de pronto saltó del agua un gran pez que intentó devorarle el pie. El joven gritó, (Tobías 6, 2)

  • Intímalos a que se sometan totalmente, porque en mi indignación voy a marchar contra ellos; cubriré toda la superficie de la tierra con los pies de mis soldados y se la entregaré al saqueo: (Judit 2, 7)

  • Apenas lo reanimaron, se arrojó a los pies de Judit y, postrándose ante ella, exclamó: "Bendita seas en todos los campamentos de Judá y en todas las naciones, las que al escuchar tu nombre, quedarán asombradas. (Judit 14, 7)

  • Luego Ester habló de nuevo en presencia del rey. Cayó a sus pies, lloró y le suplicó que anulara los planes perversos que Amán, el agaguita, había maquinado contra los judíos. (Ester 8, 3)


Jesus lhe quer bem, da maneira que só Ele sabe amar.” São Padre Pio de Pietrelcina