Encontrados 50 resultados para: pedazos

  • No te postrarás delante de sus dioses ni los servirás; no imitarás sus costumbres, sino que derribarás y harás pedazos sus piedras conmemorativas. (Exodo 23, 24)

  • Dividirás el animal en pedazos, lavarás sus entrañas y sus patas, y las colocarás sobre las partes restantes y sobre su cabeza. (Exodo 29, 17)

  • El oferente desollará la víctima para el holocausto y la dividirá en pedazos. (Levítico 1, 6)

  • y dispondrán los pedazos sobre la leña encendida que está sobre el altar, incluidas la cabeza y la grasa. (Levítico 1, 8)

  • Luego lo cortará en pedazos, y el sacerdote dispondrá esas partes, incluidas la cabeza y la grasa, sobre la leña encendida que está sobre el altar. (Levítico 1, 12)

  • Deberás cortarla en pedazos y derramar aceite sobre ella: es una oblación. (Levítico 2, 6)

  • Deberá estar preparada con aceite, en una sartén; la presentarás bien embebida en aceite, la cortarás en pedazos y la ofrecerás como una oblación de aroma agradable al Señor. (Levítico 6, 14)

  • Cortó el carnero en pedazos y los hizo arder, junto con la cabeza y la grasa. (Levítico 8, 20)

  • Luego le trajeron la víctima cortada en pedazos, juntamente con la cabeza, y él los hizo arder sobre el altar. (Levítico 9, 13)

  • Cuando llegó a su casa, tomó el cuchillo y partió en doce pedazos el cuerpo de su concubina. Luego los envió a todo el territorio de Israel. (Jueces 19, 29)

  • Yo tomé a mi concubina, la corté en pedazos y envié esos pedazos a todo el territorio de la herencia de Israel, porque se había cometido una depravación y una infamia en Israel. (Jueces 20, 6)

  • Tomó una yunta de bueyes, los despedazó y envió los pedazos por todo el territorio de Israel, con este mensaje: "Así serán tratados los bueyes del que no salga a combatir detrás de Saúl". El terror del Señor invadió al pueblo, y todos se pusieron en marcha como un solo hombre. (I Samuel 11, 7)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina