Encontrados 233 resultados para: trabajo en madera

  • Y yo haré desaparecer de su pueblo al que realice cualquier clase de trabajo. (Levítico 23, 30)

  • Ustedes no harán ningún trabajo. Es un decreto válido para siempre, a lo largo de las generaciones, cualquiera sea el lugar donde habiten. (Levítico 23, 31)

  • El primer día habrá una asamblea litúrgica, y ustedes no harán ningún trabajo servil. (Levítico 23, 35)

  • Durante siete días presentarán una ofrenda que se quema para el Señor. Al octavo día, celebrarán una asamblea litúrgica y presentarán una ofrenda que se quema para el Señor: es una asamblea solemne y ustedes no harán ningún trabajo. (Levítico 23, 36)

  • Junto con el que lo ha comprado, calculará el total de años desde el momento en que se vendió hasta el año del jubileo; y el precio de venta dependerá del número de años, computando además el tiempo en que trabajó para él, como si se tratara de un asalariado. (Levítico 25, 50)

  • Los gersonitas harán su trabajo bajo las órdenes de Aarón y de sus hijos, tanto lo que se refiere al transporte cuanto al servicio: ustedes los harán responsables del cuidado de toda su carga. (Números 4, 27)

  • Entonces el sacerdote tomará un trozo de madera de cedro, un ramillete de hisopo y una cinta de púrpura roja y los arrojará en el fuego donde se queme la vaca. (Números 19, 6)

  • El primer día del séptimo mes tendrán una asamblea litúrgica y no harán ninguna clase de trabajo. Este será para ustedes el día de la Aclamación. (Números 29, 1)

  • El décimo día de ese séptimo mes tendrán una asamblea litúrgica, ayunarán y no harán ninguna clase de trabajo. (Números 29, 7)

  • El octavo día tendrán una reunión solemne y no harán ninguna clase de trabajo. (Números 29, 35)

  • También deberán purificar todas las prendas de vestir y todos los objetos de piel, de cuero de cabra o de madera". (Números 31, 20)

  • Allí ustedes servirán a dioses hechos por la mano del hombre, dioses de madera y de piedra, que no ven ni oyen, no comen ni sienten. (Deuteronomio 4, 28)


“Se quisermos colher é necessário não só semear, mas espalhar as sementes num bom campo. Quando as sementes se tornarem plantas, devemos cuidá-las para que as novas plantas não sejam sufocadas pelas ervas daninhas.” São Padre Pio de Pietrelcina